jueves, 4 de abril de 2013

Chris Potter debuta en ECM con "The Sirens"

Chris Potter hace su debut, tras una ya extensa carrera discográfica, en el mítico sello ECM, y como no podía ser de otra manera, lo hace a lo grande, acompañado por un grupo espectacular que nos deja un disco para disfrutar de muchos y muy buenos momentos. En "The Sirens", un trabajo inspirado en la Odisea, acompañan al gran saxofonista Craig Taborn al piano, David Virelles al piano preparado, celeste y harmonium, Larry grenadier al contrabajo y Eric Harland a la batería, sin duda una formación de lujo que a través de nueve temas, todos compuestos por Potter salvo el que cierra el álbum "the Sades" de mano de los dos pianistas, nos deleitan con una música llena de energía y de texturas.
"The Sirens" es un disco que lleva claramente la mano de Manfred Eicher, el hombre de ECM, pero es puro Chris Potter. El saxofonista es un auténtico maestro del instrumento, un virtuoso como pocos, capaz de hacer discos increíbles en su ya extensa carrera tanto como líder como también de sideman, siendo su colaboración más conocida la del Dave Holland Quintet. Su debut para ECM se produce tras 3 álbumes con su último proyecto, el Chris Potter Underground, un grupo en el que el saxofonista hace una música eléctrica y llena de groove. Este trabajo supone volver al formato acústico pero con una música llena de momentos intensos como en el tema que abre el disco "wine dark sea" en el que el saxofonista da rienda suelta a todo ese potencial que es capaz de desplegar con el saxo. También hay pasajes más lentos como en el tema que da título al disco, o el que le sigue, "Penelope", que es la balada del álbum y quizás el tema más melódico del álbum, y tras esto vuelve la furia con "Kalypso" que como su propio nombre indica es un tema con rítmos caribeños dónde el líder puede volver a desatar la furia, antes de otra balada como es "Nausikaa".
"The Sirens" termina con "Stranger at the gate", un tema muy rítmico en el que Eric Harldand está soberbio (¿Cuando no lo está?). Y como cierre un pasaje sonoro a cargo de los dos pianistas que sirve como colofón a este brillante disco. Un trabajo que destaca por la gran calidad de los músicos que tocan en él, con una rítmica espectacular, dos pianistas que son magos de las texturas y de las armonías y un líder que aunque nos tiene acostumbrados a un gran nivel, firma sin duda uno de los mejores trabajos de su carrera discográfica. Un gran salto el de Chris Potter al saltar a un sello tan prestigioso como ECM que sin duda se ha ganado tras una brillante carrera.